Después de hacer un repaso a todos los juegos de “Los Simpson”, la verdad es que había pocas esperanzas sobre el éxito de este título de EA, que salió a finales del año pasado en multitud de plataformas. Sin embargo, los creadores han tenido la genial idea de reirse de sí mismos, de la industria del videojuego, y de toda la cultura pop de los últimos años.

La familia Simpson va descubriendo poco a poco que está en un videojuego, y que cada uno tiene una serie de poderes. Cuando son conscientes de esta capacidad, tienen que evitar una invasión alienígena –¿de qué me suena esto?–, y salvar una vez más a Springfield. Un curioso argumento que da pie a algunas situaciones realmente hilarantes, en un juego que quizás podría haber sido aún más grande… veamos porqué.

Plataformas, puzzles y cachondeo

Se podría decir que el juego consta de dos partes. En primer lugar, podemos deambular libremente por Springfield utilizando cualquiera de los personajes de la familia, después de que los hayamos desbloqueado. En este escenario abierto, tenemos que encontrar multitud de objetos ocultos, y también podemos participar en algunos minijuegos.

Por otra parte, van apareciendo algunos lugares especiales en el mapa, en los que se juega normalmente dos personajes, salvo en el tutorial y en el último nivel. Cada una de estas dieciséis fases está pensada para utilizar las habilidades especiales de cada uno de los personajes, que nos permiten avanzar si alternamos adecuadamente entre nuestros avatares.

Por ejemplo, Homer se convierte en una bola que arrasa con todo, Marge puede controlar a las masas con su megáfono, Lisa puede mover grandes objetos con una técnica budista, y Bart se puede convertir en el superhéroe Bartman y flotar temporalmente en el aire. Hay más poderes y habilidades temporales –por ejemplo, Marge puede soltar a Maggie para que se cuele en espacios pequeños, o Bart puede ponerse un casco de Realidad Virtual y arrasar con su láser–, pero normalmente se utiliza un conjunto reducido de ellas.

El juego también permite juego cooperativo, mejorar nuestros tiempos en cada una de las fases… y poco más. Realmente este es uno de los fallos más graves del juego, ya que una vez terminado, no hay demasiado aliciente más allá de desbloquear todos los secretos. Aún así, completar el juego nos llevará unas cuantas horas, y nos tendrá bastante enganchados durante ese tiempo.

El universo de los Simpson en tu consola

Nada más empezar, nos encontramos manejando a un orondo Homer dentro de un onírico mundo de chocolate. Este nivel tiene dos funciones: enseñarnos los controles básicos, y que el juego nos entre por los ojos. Y es que el motor emplea a la perfección el cell shading, para que casi parezca que estamos dentro de un episodio de la serie. Además, de vez en cuando vemos algunos vídeos en alta resolución para introducir los capítulos, y salvo alguna que otra excepción, son bastante buenos.

Como punto negativo, que hace perder bastantes enteros al título, tenemos la cámara. Muchas veces nos volveremos locos tratando de hacer algo tan sencillo como un salto, porque de repente la cámara da un giro inesperado… menos mal que morir generalmente no significa nada, ya que continuaremos en uno de los frecuentes puntos de control, o simplemente se pasa al otro personaje mientras que el nuestro recupera su energía.

Esas voces me suenan…

Uno de los mayores encantos del juego es el doblaje, ya que todos los personajes con los que nos encontremos tienen algo que decir, y casi siempre es algo divertido. Desde chascarrillos, hasta guiños a otros juegos y películas, estas frases casi siempre consiguen arrancarnos una sonrisa. Mención especial al nivel que transcurre en el “Motor del Juego”, en el que merece la pena acercarse a unos envejecidos Mario y Sonic para escuchar sus lamentos 😉

Las músicas también rezuman el carisma de “Los Simpson”, y la melodía compuesta por Danny Elfman se escucha junto a otras composiciones realmente alegres, y que acompañan perfectamente al juego.

Conclusiones

No es el juego de “Los Simpson” definitivo, pero al menos sí es mejor que casi todos sus precedesores. Es divertido por su desarrollo –con ciertos matices–, pero sobre todo por la cantidad de referencias que nos encontramos por el camino. Desde el “Grand Theft Scratchy” hasta referencias a películas como “Terminator 2”, pasando por homenajes a sagas clásicas, o incluso cameos de gente de la “Vida Real“TM, como Will Wright. Eso por no hablar del dueño de la tienda de comics y su hilarante colección de clichés.

Si nos olvidamos de la cámara y del errático control –acabar con los enemigos es más una cuestión de suerte que de habilidad–, tenemos un juego bastante decente, y que puede proporcionarnos unos buenos ratos. Y eso ya es decir mucho para un juego de esta serie de personajes amarillos 😉

Lo mejor:

• El humor que destila por cada uno de sus poros.
• El doblaje y las frases que sueltan los personajes.
• Visualmente es muy similar a la serie.

Lo peor:

• La cámara y algunos problemas con el control.
• Se hace bastante corto.
• En el modo cooperativo, a veces uno de los jugadores sólo se dedica a esperar.