Hace algunos lustros, el mayor punto de encuentro para los aficionados eran los salones recreativos. En estos antros de perversión, había que demostrar a los demás nuestra pericia al volante, nuestra destreza con los mandos, y nuestra paciencia con los pesados de turno, pero lo importante es que pocas veces jugábamos solos.

Esta magia se fue perdiendo con los años, a medida que las consolas iban cobrando más protagonismo, y nuestras partidas se hacían cada vez más “privadas”. Internet ha ido cambiando esta tendencia, y ahora podemos charlar con nuestros amigos virtuales –o reales– sin salir de casa, mientras que echamos unas pachangas en los cada vez más populares juegos multijugador.

Por otro lado, las redes sociales han hecho que mucha gente se enganche con juegos sencillos, sobre todo por el aliciente de superar al vecino. De hecho, hoy en día “Farmville” tiene más usuarios que “World of Warcraft”, y cada vez más compañías se apuntan a la moda de hacer juegos para Facebook.

Y es que esto no parece ser algo pasajero precisamente. No hay que olvidar que aunque Xbox 360 y PlayStation 3 tienen sus propias “redes sociales”, estas plataformas han ido acercándose cada vez más a las plataformas más extendidas. Microsoft decidió integrar Twitter y Facebook en el dashboard de su consola, y en varios títulos de ambas plataformas se puede configurar nuestra cuenta de Twitter para ir mostrando nuestros progresos a nuestros seguidores. Y es que eso de presumir de los logros es muy humano…

Nintendo parece jugar en otra liga –en todos los sentidos–, y ya sea por proteger al mercado infantil, o por algún otra razón de peso que se me escapa, nunca ha optado por “socializar” sus consolas. La verdad es que hoy en día los códigos amigo son engorrosos, anacrónicos y bastante inútiles, pero imagino que hasta que no pierdan cuota de mercado, no van a pensar en cambiar su sistema.

Por otra parte, me ha sorprendido que hasta hace poco no hayamos tenido una red social “vertical” en condiciones para los aficionados a los videojuegos. Aunque en Eurogamer hace tiempo que han tanteado esta posibilidad, no ha sido hasta la creación de proyectos como Wipley o Nosplay cuando he visto algo más tangible en este sentido. Todavía tienen que madurar un poco, pero creo que aquí hay un filón importante en los próximos años.

En definitiva, el ocio y nuestra faceta más social siempre han estado unidas, y con el auge de Internet, cada vez es más palpable una convergencia más clara entre estos aspectos de nuestra vida lúdica. En la próxima generación de consolas, creo que no vamos a ver un salto tecnológico demasiado grande –sobre todo, porque a muchas compañías ya les cuesta dar la talla en la actual–, pero apuesto a que Internet será una pieza fundamental, hasta tal punto que es posible que los juegos en formato físico tengan los días contados… aunque eso ya es otra historia 😉

PD: La imagen de la cabecera es del título Ai Sp@ace, un juego multijugador social japonés de lo más particular…