Los que me sigáis desde hace tiempo, ya seréis conscientes de que soy muy inquieto con el diseño del blog. Lo he cambiado varias veces desde que lo empecé hace más de siete años, con el doble objetivo de aprender nuevas técnicas, y también para hacerlo más agradable de leer… o al menos eso he intentado 😉

En esta nueva iteración, me he interesado por la nueva moda del “diseño responsive”, que trata de adaptarse al navegador que se esté utilizando para ofrecer una experiencia adaptada y optimizada para cada caso. Con una buena base en HTML5, y usando media queries de CSS3 se puede ir ampliando y cambiando la posición y tamaño de los distintos elementos para aprovechar mejor el espacio disponible. Esta es mi primera experiencia, y por tanto todavía quedan algunos aspectos por pulir. Por ejemplo, en algunos navegadores móviles no se escala bien el tema, pero espero solucionarlo en los próximos días.

Por otro lado, he aprovechado para implementar un par de cambios que quería hacer desde hace tiempo. Por un lado, está el tema de las imágenes. Desde que Flickr incorporó el ancho de 640 píxeles a las fotografías, quería hacer uso del mismo para el blog, pero la “vieja” columna de 560 píxeles me lo impedía… así que he ampliado el área de lectura. El otro cambio es el de los sliders que había a la derecha. La experiencia me dice que no son efectivos, distraen, y además consumen bastantes recursos, así que decidido poner en pequeño unos cuantos destacados, y también unos enlaces a mis otras webs en la parte de abajo, ya que los JavaScripts que consumía de Tumblr a veces bloqueaban la carga de la página.

De paso, he quitado la publicidad de Adsense –total, para los cuatro duros que generaba no merece la pena–, he simplificado las categorías, he hecho limpieza de enlaces, y he quitado el buscador de la página, que no usaba casi nadie. Siempre se puede usar Google, y de hecho lo he integrado en la página de error, y en el archivo.

Si a esto le sumamos el hecho de que he quitado las imágenes en la portada y en la navegación de categorías, he conseguido reducir bastante los tiempos de carga, e incluso con una conexión 3G la página se muestra bastante rápido. Dejando de lado los aspectos técnicos, espero que esta versión simplificada de la página os guste y que sea agradable de leer. A mí por lo menos me han entrado ganas de escribir 😉