A mediados del mes de octubre del año pasado se celebró la segunda edición de Madrid Games Week, nacida de las “cenizas” de las pasadas GAMEFEST. La verdad es que tenía ganas de ir para ver qué tal le había sentado el primer año a PlayStation 4, y a Xbox One, y por supuesto para volver a ver a mucha gente con la que sólo coincido en eventos de este tipo.

Aunque no calificaría la feria como un desastre, lo cierto es que tiene muchos puntos a mejorar si pretende convertirse en un punto de referencia en el mundo de los videojuegos. Aunque hubo ciertos progresos con respecto al año anterior (como la presencia significativa de desarrollos independientes), me volví a quedar con un sabor agridulce…

Impresiones

Lo primero que me llamó la atención al entrar en el pabellón ocho de IFEMA, fue lo desangelado que estaba. Algo relativamente normal al no estar montado todo el “tinglado” todavía, pero si tenemos en cuenta que en esta ocasión el suelo entre expositores estaba “virgen”, sin una mísera moqueta, parece que se rebaja unas décimas el nivel del evento. ¿No era esta industria la que movía más dinero que el cine?

Por otro lado, después de dar una vuelta, me di cuenta de que faltaban muchas compañías del sector, y que la noticia de que había 90 stands había que cogerla con pinzas. Con unas pinzas de precisión atómica.

Y es que de esos 90 stands sólo un porcentaje muy pequeño eran los “grandes” del sector, con ausencias notables como Koch Media, Konami, SEGA… aunque también es cierto que algunos de sus juegos se pudieron ver en los stands de otras compañías.

Los “grandes”

Como era lógico, gran parte de la superficie del pabellón estaba repartida entre Sony, Nintendo y Microsoft.

La compañía presidida por Kazuo Hirai presentó gran cantidad de novedades para sus consolas, haciendo especial hincapié en los títulos para PlayStation 4. Se podría afirmar que PS Vita fue ligeramente maltratada –¡sorpresa!–, pero siendo justos también se pudieron ver lanzamientos de calidad para la portátil.

Por cierto, el hecho de que dedicaran más espacio a “Minecraft” que la propia Microsoft fue algo bastante cómico…

En Sony también tuvieron un hueco para la incipiente Liga Oficial PlayStation, y dedicaron un área a los “innovadores” con los PlayStation Awards. Eso sí, me pareció muy triste que la pobre gente tuviese que llevar sus propios equipos, y que no les dieran una consola para presentar sus proyectos de una manera digna.

Por su parte, Microsoft presentó bastantes novedades de Xbox One, y también se pudieron ver muchas Xbox 360 dando guerra todavía. Dejando de lado lo más “comercial” –que se ha podido ver estas mismas navidades–, me alegró enormemente ver por allí a Ramón Nafria promocionando el simpático “Funk of the Titans”, que se ha publicado hace unos días.

En Nintendo demostraron que Wii U tiene un catálogo bastante potente, dejando de lado las limitaciones técnicas. La que noté algo falta de fuelle es 3DS/2DS, que casi parece tener más modelos este 2015 que lanzamientos de software.

Por otro lado, también tuvieron estuvieron presentes Warner, Activision, Take 2 y Electronic Arts… aunque algunas de forma casi testimonial con sus sagas y títulos más punteros, y bajo el amparo de Microsoft. Personalmente, creo que la que sí que se lo curró bastante fue Bandai Namco, con un stand muy colorido y cargado de material.

Los demás

Un poco más lejos de la entrada podíamos encontrar otras distribuidoras, como BadLand Games o Wargaming, además de compañías tecnológicas como LG que presentaban lo último en televisiones.

También me llamó la atención la cantidad de empresas centradas en el mundo del PC que tuvieron presencia en el evento, como Asus, Acer, BenQ, Corsair, o Gigabyte, por poner unos ejemplos.

Las tiendas

Por supuesto, no podía faltar la venta directa en un evento como este. Como reclamo central, teníamos un puesto de la franquicia por excelencia en nuestro país.

También se pudo ver por allí a Alvicious, una tienda madrileña que poco a poco se ha convertido en una referencia en el mundo del PC.

Los puestos de merchandising de todo tipo fueron una pequeña plaga. Ofrecían desde camisetas y pequeños abalorios de todo tipo, hasta figuras con precios que asustaban… especialmente en Square Enix Products.

Como nota curiosa, también había algunos puestos de comida, con golosinas e incluso dorayakis. Por cierto, ¿qué narices pintaba allí Just Eat? Ah, vale, que ponían pasta en el evento…

Y por último, comentar que también estuvo por allí el equipo de Hobby Consolas, promocionando las revistas de la editorial, y mostrando algún que otro producto en exclusiva.

Indies y zona “educativa”

En esta ocasión, la presencia de desarrolladores independientes fue considerable. A lo visto en los stands de Sony y Microsoft había que sumar los que había en la zona de Made In Spain Games, que siempre estaba a rebosar de gente.

A su lado había otro grupo bastante numeroso de indies, con gente veterana como Lakento, el equipo de “Randal’s Monday”, o presentando proyectos tan interesantes como “Evil Cubes” o “Super Rocket Shootout”.

Alrededor de ellos, y para animar a los asistentes a convertirse en desarrolladores de éxito (bonito oxímoron), había varias academias especializadas en diseño de videojuegos.

Comentar también que estuvo por allí el equipo de Fase Extra Magazine, y de hecho grabaron un podcast en el evento contando con la presencia de gente del sector que acudió a la feria.

RetroMadrid

Aunque la AUIC no estuvo directamente implicada en el evento, cedió la marca y empezó a organizar a todos los expositores, siendo “invitados” posteriormente por la organización de Madrid Games Week.

¿Por qué he entrecomillado lo de invitados? Por la sencilla razón de que su asistencia no sólo les costó el desplazamiento y el alojamiento, sino que a diferencia de otros años tuvieron que pagar por exponer allí, aunque fuese una cantidad relativamente simbólica. Teniendo en cuenta que algunos de los asistentes no vendían nada y que fue algo completamente altruista, no puedo más que aplaudirles por asistir al evento en esas condiciones.

Exposiciones

En una esquina de la feria se podían ver las ilustraciones de David Saavedra, los fotomontajes de Víctor Somoza, y las acuarelas de Isabel Cano, que la pobre colgó como pudo después de que un miembro de seguridad la preguntase que estaba haciendo en la pared… en fin.

Conclusiones

Me dejo algunos detalles, como el simulador en el que nadie quería subir, los Youtubers que se pasaron por allí, la presencia simbólica del desarrollo polaco, los miniproyectores de Philips / Sagemcom, las charlas que se impartieron, o los pobres arrinconados de la liga nacional de robótica –que ya se podrían currar una web más “moderna”, por cierto–, pero con estas pinceladas podéis haceros una idea del ambiente que se vivió durante esos días.

Espero que este año el evento tenga aún más fuerza, y que se demuestre que la industria del videojuego en nuestro país está más viva que nunca. Hace tiempo llevar “Risky Woods” a la Mega Drive fue un logro único, pero hoy en día tenemos presencia en numerosas plataformas gracias a las facilidades de publicación, y al esfuerzo de mucha gente. Ojalá este 2015 refleje esta verdadera edad de oro del software español en una feria a la altura de las circunstancias.

Y por supuesto espero que vuelva a ser un punto de encuentro con mucha gente que convierte a estos eventos en algo realmente especial. ¡Nos vemos a la próxima!