Todavía recuerdo el impacto que me produjo ver las primeras aventuras gráficas de Lucasarts, conocida por aquel entonces como Lucasfilm Games. Yo venía de jugar conversacionales como la “Aventura Original” o “Cozumel”, así que probar “Maniac Mansion”, “Indiana Jones: La Última Cruzada”, “Monkey Island”, o “Loom” era casi mágico… algo bastante literal en el caso del último título.

En aquella época yo no tenía un PC en casa, y de hecho no llegó hasta 1999, por lo que me perdí la época dorada del género. Aunque pude recuperarla gracias al fantástico SCUMMVM, me dio mucha pena comprobar como poco a poco las aventuras gráficas iban perdiendo fuelle, hasta nuestros días, en los que encontrar un juego de este tipo es toda una aventura…

Afortunadamente, FX Interactive se niega a ver morir este género, y en los últimos años han publicado algunas de las mejores aventuras gráficas que se pueden encontrar en el mercado, como “The Longest Journey”, “Sherlock Holmes”, las dos entregas de “Runaway”, o este “Jack Keane: Al Rescate del Imperio Británico”.

Guiños al pasado y al presente

A pesar de lo que pueda sugerir el logotipo del juego –o la contraportada–, este juego bebe más de la saga “Monkey Island” que de la del Doctor Jones, aunque imagino que habrán querido aprovechar el tirón de la última –y regulera– película del personaje interpretado por Harrison Ford. De hecho, el juego tiene bastantes guiños a lo que pudimos vivir junto a las aventuras diseñadas por Ron Gilbert, aunque los chicos de Deck13 se han encargado de hacer referencias no sólo a aventuras clásicas, sino a multitud de elementos de la cultura actual. De esta manera, el juego nos sorprenderá con chistes sobre los timos por correo electrónico, o con subastas en eBay, por poner un par de ejemplos.

Esto no deja de sorprender, ya que el juego se encuentra ambientado en la época victoriana –con una historia que no pienso desvelar para que no pierda el factor sorpresa–, pero el carácter desenfadado del título permite este tipo de licencias. El humor que destila nos hace olvidar su linealidad absoluta –se echa de menos algo como lo visto en “Indiana Jones & The Fate of Atlantis”–, y también hace que perdonemos que la duración no sea especialmente destacable. Por otro lado, hay que destacar que los trece capítulos son bastante variados, y que ciertos objetos del juego desbloquean contenido extra en un “museo” bastante original.

Entorno gráfico cumplidor

Normalmente las aventuras gráficas no brillan por su apartado técnico, y este juego no es una excepción. A pesar de que no es precisamente malo, el motor gráfico no hace gala de demasiados alardes, y quizás peca de mostrar unos gráficos con aristas bastante pronunciadas, pidiendo anti-aliasing a gritos. Además, la expresividad de los personajes a veces no está muy conseguida, salvo quizás en el movimiento de los ojos.

Por lo demás, el juego nos tiene preparados unos entornos muy coloristas, con unos personajes bastante graciosos –tanto en diseño como por sus voces, como veremos más adelante–, y con una estética muy apropiada para un juego de estas características. Además, no necesitamos el último ordenador para moverlo, algo que se agradece viendo los títulos que salen para Windows hoy en día.

Perdone, ¿esto es una película?

Aunque la música y los efectos de sonido no son muy destacables –al menos no molestan ni resultan estridentes–, lo que sí que merece una mención a parte es el doblaje. Cada uno de los más de treinta personajes que nos encontramos en el juego tiene una voz característica, y el doblaje está realizado por auténticos profesionales. Como único pero, comentar que el nivel no es constante, y algunas interpretaciones denotan cierta dejadez, pero en general cumple con nota, y es algo muy de agradecer en un juego de este género.

Por otro lado, muchos de los toques humorísticos del juego vienen por el doblaje y la genial localización del juego, y se nota que FX Interactive ha querido que los españoles disfrutemos con “Jack Keane” de una manera especial.

A golpe de ratón

Lo mejor del juego, es que se controla de una forma muy sencilla. Casi todas las acciones se realizan con el ratón, aunque también se emplean algunas teclas. Además de la típica para sacar los menús, el tabulador nos recuerda los objetivos que tenemos en cada momento, y la tecla X señala los objetos con los que podemos interactuar. Este último detalle se agradece bastante, sobre todo en un tipo de juegos en los que se abusaba de tener que mover el puntero píxel a píxel en busca de lugares útiles.

Sin embargo, en algunas ocasiones este título peca de uno de los clichés de las aventuras gráficas: los puzzles absurdos. No llega a los niveles de las dos primeras entregas de “Mundodisco”, pero a veces hay que probar combinaciones inverosímiles para poder continuar. Por lo menos, en la web oficial están publicando una guía por capítulos –completa el próximo 8 de julio– que nos vendrá de perlas por si nos atascamos en algún punto.

Conclusiones

“Jack Keane” no es un juego para todos, especialmente para los que buscan lo último en tecnología, o para los que se amilanen ante cualquier dificultad, pero creo que hay que darle una oportunidad. En primer lugar porque se lo merece por méritos propios, y porque seguro que os proporcionará buenos momentos. Y por otra parte, porque FX Interactive nos lo ofrece a un precio irresistible –19,95€, ya podrían tomar nota otras distribuidoras–, y debemos agradecer el esfuerzo puesto en la localización y adaptación del juego a nuestro mercado.

Además, una buena aventura gráfica no se ve todos los días, ¿verdad? 😉

Lo mejor:

• El humor que destila el juego.
• Una aventura gráfica como las de antaño.
• Un precio genial, teniendo en cuenta el trabajo de localización, la calidad del manual y la buena presentación en general.

Lo peor:

• Se puede hacer algo corto.
• Algunos puzzles no tienen demasiada lógica.
• Que no te guste el género ni los juegos pausados.