…para que el cine vuelva a ser lo que era.

El otro día vimos esta película del –a veces– sorprendente M. Night Shyamalan, y al terminar no sabíamos si habíamos visto la peor película del año o de la historia. No sé si me estoy haciendo viejo, o tengo el gusto en el culo, pero no me gustó “Cloverfield”, no me gustó “REC”, y creo que esta ha superado a todas en cutrez.

Y es que los 90 minutos de metraje se hacen eternos, porque si has visto el trailer, has visto la película:

¡No pasa nada más! Los personajes no evolucionan, los diálogos son absurdos, y el desarrollo de la película es sencillamente terrible. Eso por no hablar del nulo suspense de la película, porque no va más allá de lo evidente. Atención, SPOILERS:

En “El Sexto Sentido” el protagonista parecía que estaba muerto y… ¡sorpresa! En “El Protegido”, Bruce Willis parecía un superhéroe y… ¡oh Dios mío, lo era! En “Señales” parecía que había extraterrestres… ¡y salen! En “La Joven del Agua” todo parecía un cuento… ¡que resultaba serlo! “El Bosque” parecía una mierda…

Bueno, creo que no hace falta ser un genio para adivinar el argumento de la última película a los cinco minutos de visionado.

En las otras películas, el hecho de que se intuyese el final no hacía que estas perdiesen fuerza. Es más, hasta el último minuto estabas en tensión pensando “no puede ser, no puede ser,…”, hasta los flashbacks finales. Ahora, todo nos lo dan mascadito desde el principio, y ni siquiera ver algunas de las muertes más grotescas de la historia añade un punto de interés. Una auténtica pena…

Lo curioso es que es que un par de días antes vimos “La Niebla” –la peli de la novela que inspiró “Half Life”–, y aunque no es precisamente una maravilla, sí que supo transmitir mucho mejor cómo se puede comportar un grupo de personas ante una amenaza desconocida. Y eso por no hablar del glorioso final, que deja en pañales al de “El Incidente”.

En fin… ¿soy yo, o últimamente no hay nada decente en cartelera?